Empieza el mes de julio. Seguramente, también días de vacaciones y si no, fiesta. Muchas fiesta. Fiesta en casa de amigos, fiesta de noche. Terrazas, discotecas al aire libre, cenas largas con copa… muchos momentos de risa y relajación. Que dejar el estrés aparcado por unas horas nunca viene mal. Así que veamos alguna idea para una noche de fiesta.
La idea perfecta es la que se pueda reutilizar. Es decir, un vestido que tanto podamos llevar en noches locas como en un día a día tranquilo, de paseo. Por ejemplo, un vestido corte túnica, de seda. Manga francesa, amplia. El punto lo pondrá un maxianillo y una cinta en el cabello según el estilo que nos apetezca:
- Aire hippy, entonces con unas sandalias planas, en corte T y la cinta alrededor de la frente. Estrecha y trenzada, con el cabello suelto.
- Aire romántico, con unas sandalias altas con cordones en el empeine. La cinta con una flor lateral o con una cascasa de flores a los lados.
- Aire francés, entonces con un peep toe y la cinta con una lazada.
Un vestido y mil opciones para jugar con el humor con el que nos levantemos.
Seguid tan guapas.
No se te ocurra: chanclas de playa. Eso de vengo de la playa y de repente tengo una copa en la mano y bailo en el pub con la bolsa y la toalla, pues no.
Un bolso grande de paja, por la noche. No es lo mismo una cartera de rafia (ideal) que un capazo de playa.
Piernas descuidadas. Son el punto fuerte. Por muy bronceadas que vayan si no están bien depiladas, bien exfoliadas y perfectamente hidrtadas, no habrá nada que hacer.
Collares. Si el vestido es estampado no le pegan los collares.
Un sombrero. Para la noche ni pensarlo. Los focos de los locales pueden deslumbrar… ¿pero tanto?
Lo encontrarás en: el vestido estampado de la izquierda es de Cortefiel. El de la derecha, de Diane von Furstenberg.