Si ayer hablábamos de una invitada de boda con vestido crudo, la de hoy será una invitada de boda con vestido rojo. Como el de Candela.

Candela tiene un vestido rojo intenso, ceñido y con corte capa por detrás. Quiere combinarlo para que se vea elegante:

• La apuesta segura: con plata. Unas sandalias tipo jaula de color plata y cartera de mano pero en rojo, forrada de encaje rojo. En el cabello, unas horquillas con perlas.
• La más innovadora: con verde agua. Suavizará lo intenso del rojo. Sandalias y cartera de mano en este color. Tocado de plumas de gallo en rojo con detalles en agua y plata.
• La de mujer fatal: con tocado de red con plumas de faisán y cartera de mano y zapatos salón en nude. 
• La más suave: con gris marengo. Zapatos peep toe de ante y bolsito con cierre de boquilla en igual color.

Si hace frío, nos colocaremos una estola de plumas o una capita de seda en rojo, para que la capa de la parte trasera del vestido no se desluzca. Y si te gustan, unos labios rojos, en mate.

Seguid tan guapas.

No se te ocurra: con negro. Es evidente y poco elegante. Quizás en invierno, pero en verano adiós-fatal.

No llevar faja si ves que tus muslos no son tus amigos. Con vestidos ceñidos, nada de ir luciendo corchitos. Para eso se han inventado las fajas. Una bien elegida, sin costuras, te hará un maravilloso favor.

Cuidado con combinarlo con dorado. Muy 70′ s. Para eso tendrías que adoptar esa actitud y superenjoyarte. Todo más excesivo.

Megaplataformones. El vestido ya es guerrero de por sí. Taconazo sí, pero plataformón no.

Hay otras combinaciones como el naranja, el fucsia o el morado que también tienen cabida. Le dan un aire más atrevido. Úsalas sólo si te sientes segura luciéndolas.

Un bolero. Han pasado a la historia. Es la era de las toreras.

Y por supuesto, muerte al chal. Antes hazte una capita de seda. Quedan monísimastelojuro.

Lo encontrarás en: el vestido de Candela es de Versace para H&M. La cartera de mano, de Bimba&Lola.