El agua es mi enemigo. Eso no significa que sea una cochina, que una es muy limpita y aseadita. Pero precisamente, por ser tan limpita, no me queda más remedio que batallar cada día con el agua. Con todas sus cales y sus cosas. Qué lista era Cleopatra, pero qué lista.
Si al asco de agua del grifo unimos una piel repelente, sensible, y con tendencia a secarse más allá de lo humano y casi cerca de lo paquidérmico, la gran solución reside en hidratar cada vez que se pase por agua. Y si lo hago con la loción rehidratante esencial Ureadin de Isdin, el milagro sí existe.
He probado casi todas las hidratantes del mercado. Y si bien la hidratante al aceite de oliva Deliplus de Mercadona me va muy bien, no hay nada que pueda superar a la maravilla de Ureadin. Se aplica con dosificador, se absorbe rápidamente y apenas tiene olor, con lo que no se mezclará con nuestro perfume. Además, con toda la garantía de Isdin, de la que soy fan absoluta (y no me pagan por decirlo, ojo).
Lo encontrarás en famacias y parafarmacias. El precio del bote con dosificador, de 500 ml. es de alrededor de los 15 euros.