Los complementos nos definen. Una camiseta blanca + un vaquero pasan por estilos muy diversos sólo con ayuda de los complementos. Por eso, puede resultar una buena idea invertir en zapatos, bolsos y accesorios varios ahora que la cosa está mala: duran mucho más tiempo, y cambian la cara de un mismo conjunto para llevarlo una y otra vez.
Obviamente, la casa tira, a mí las pulseras que me traen loca y que me dan mucho juego, son las pertenecientes a la colección Faubourg de El Jardín de Lulaila. Y más en verano, que al llevar los brazos al aire puedo llevar tantas como quiera y así tienen ese punto un poquito más canalla que realmente me gusta de Faubourg.
Para ello, mezclo una de cuero negro, con perla y calavera. Otra de cuero nude, con calavera y perlita de río. Y entre ambas, una con cadena (perfecta para aquéllas a las que las perlas no les acaban de convencer) que me encanta porque me recuerda a las esclavas doradas tan de los 80 (confieso que las de cadenote grueso que llevaban los hombres me parecen una auténtica maravilla).
Quedan estupendamente bien porque dan la sensación de un brazalete hecho de cuero, y visten la muñeca saliéndose de lo habitual. Encantada que voy yo con ellas.
Las combino con una falda negra y una simple camiseta en tostado + sandalias abotinadas en cuero natural. Pero también, con leggings de cuero + jersey de punto fino negro + sandalias de tacón. O con chaqueta de lentejuelas + camiseta de rayas marineras + vaquero de pata ancha + sandalias de suela de madera y tacón cuadrado. O con falda larga + blusa blanca + cuñas de esparto.
Lo que os digo de los complementos… van con todo.
Seguid tan guapas.
No se te ocurra: la ventaja de las pulseras con respecto a los brazaletes es que se mantienen fijas en la muñeca. No giran, no tintinean, con lo que resultan menos aparatosas y más cómodas.
Si vas a llear pulseras, la gente mirará tus muñecas y por ende, tus manos. Que vayan arregladas, por favor.
Los pantalones de pata ancha tienen que dejar ver levemente, un centímetro, el tacón del zapato. Ni más ni menos. Ni a la pesca de río, ni arrastrando por el barro.
Con los pantalones de pata ancha, busca siempre calzado de inspiración 70. Los tacones finos y los stilettos como que no pegan demasiado.
Vete pasando un poco de complementos más propios de chicas de 20 años si ya pasas los 30. Como con los zapatos, se va exigiendo un poquito más de calidad.
Lo encontrarás en: el look de la derecha es de Blanco. Las pulseras son de El Jardín de Lulaila. Pertenecen a lo nuevo y están aquí.