Nueva sección, querida/os.
Mil veces nos hemos encaprichado de una prenda o complemento que nada más verlo nos ha nublado la vista hasta tal punto de acudir ciegamente a la caja y pagar sin pensar con qué lo pondríamos después. La consecuencia lógica de tal acción no es más que tener esos caprichos en el armario en modo museo. Es decir, con la etiqueta puesta y sin haberlo puesto jamás.
Yo pienso que todo puede ser. Que todos y cada uno de esos momentos prisa-amor-a-primera-vista pueden tener su oportunidad. Y que si nos enamoramos tan rápidamente de ellos es porque realmente tienen sentido en nuestro armario.
Con ese ánimo nace esta nueva sección ¿Cómo me lo pongo? A ella podréis enviar las fotografías de aquellas cosas que tanto os gustaron pero a las que no les encontráis aplicación. O poneros de una manera diferente algo de lo que ya estáis cansada/os. Que la crisis tampoco nos deja tirar demasiados cohetes. Seguro que hay luz al fondo del túnel.
Seguid tan guapas.