El tiempo está loco. Veranos que no parecen veranos e inviernos con temperaturas revolucionadas. Esta situación rebelde nos desequilibra, nos hace perder la paciencia. Pero la gota que colma el vaso es viajar. Principalmente si el destino es una de esas ciudades a las que el verano parece que no va a llegar, y que nos hace pensar que nuestra maleta se parecerá más al baúl de la Piquer que a lo que las compañías aéreas nos piden. Así que si vamos a hacer turismo de ciudad, pero de ciudad fresquita en las que la playa es una utopía y prima más el paraguas y las botas, veamos la maleta ideal para no sobrepasar esos 10 kilos demandados. En una situación similar se encuentra Eva, que pasará un tiempo por Londres.
Hay dos imprescindibles que no pueden faltar en la maleta: uno es un trench, una gabardina que puede ser del corte que deseemos, siempre y cuando sea lo suficiente polivalente como para poder llevarlo tanto de sport como en estilismos más arreglados. Y otro es un paraguas pequeñito, plegable. Más cómodo aún es decantarse por un gorro de lluvia, pero ya lo dejo para gustos personales. El resto de normas a seguir son siempre las mismas: polivalencia y sentido común. Mirar las previsiones meteorológicas en internet es obligado, así no nos vamos a llevar sorpresas de última hora. Teniendo en cuenta un tiempo regular, sin posibilidad de playa, la maleta ideal para cinco días fuera, será:
- Dos pantalones. Puede ser un vaquero pitillo y uno blanco o negro. Tanto uno como otro serán imprescindibles para el día y la noche.
- Tres camisetas. Dos de ellas, lisas. De este modo, las puedo poner tanto de día como de repente, de cena. De día con un foulard; de noche, con un collar.
- Dos tank top. Si el fresco ya es frío, me servirán para mitigarlo bajo los blusones o las camisetas.
- Dos blusones. Exactamente igual que con las camisas.
- Una camisa masculina.
- Un vestido. Y si el vestido me permite ser llevado con el pantalón, todavía mejor. Por si la noche se pone rebelde.
- Un par de botas planas de media caña, o moteras. Si vivo en el sur me parecerá una locura, pero a 15º y lloviendo, se agradecen. En el caso de que no me gusten las botas o no tenga, pues unas deportivas estilo Converse o Gola pueden servir.
- Unas bailarinas por si de repente para de llover o el día es más agradable.
- Un único par de tacones. Cuando el tiempo es demasiado fresco no te va a apetecer arreglarte hasta ese extremo.
- Dos chaquetas de punto largo. Tanto para ir a cuerpo como para llevar bajo el trench.
- Si no puedo vivir sin verme muy arreglada en algún momento de la semana, entonces un blazier, que con camiseta+vaquero+tacones me soluciona el día.
- Un foulard. Si es de algodón orgánico en color liso, me permite ponérmelo para todo.
- Un cinturón. Y si me vale para los blusones y los vaqueros, perfecto.
Así de simple. Meter cosas adicionales será engordar innecesariamente la maleta. Una vez que salga del hotel, difícilmente volveré a cambiarme (máxime si mi viaje es a alguna ciudad europea, en las que cenan tan temprano). Además, todo será cambiar ligeramente el chip: estilo es una actitud, no cambiarse de ropa cientos de veces al día.
Besísimos.
No se te ocurra: mil bolsos. Con el que lleves será suficiente. Y si crees que para salir te hará falta otro, entonces con una carterita de mano estará bien.
Un paraguas tamaño golf. Sí señor, muy útil y sobre todo, cómodo para moverse en muchedumbre.
Chanclas. Si has visto que va a llover, ¿para qué las llevas? ¿para no tener que lavarte los pies en el hotel?
Ocho mil collares. Y mucho menos si vas a coger un avión y te los llevas puestos de casa. El tiempo que perderás en el arco de seguridad despojándote de todos tus adornos te enojará. ¡Y acabas de empezar el viaje!
Miles de pares de tacones. Por mucho que seas de las que dicen que en tacones está de maravilla y que no le duelen los pies, y que está acostumbradísima, pasear una ciudad adoquinada con los mismos, es matador.
Llevarte el libro más gordo y grande que tengas. Por mucho que estés enganchada a la trilogía Millenium, es pelín pesado y molesto viajar con tal tomo.
Lo encontrarás en: el trench es de Zara. La camiseta en algodón orgánico, de Massimo Dutti.