Si has leído los post anteriores sobre prendas exteriores y sobre zapatos, entonces lo único que te falta para completar mis recomendaciones de tendencias otoño-invierno 2017-2018 es éste mismo. Porque esta temporada no hay nada nuevo bajo el sol pero sí pequeños detalles a los que volver a darles protagonismo, acoplarlos a tus looks de siempre y que se te vea divina estás preparada para el baile.
Vamos con las 7+1 compras que harás esta nueva temporada (o que rescatarás del armario):
- La pana. Ese tejido tan de los 60-70-80-90, tan ligado a nuestra infancia y que en el año 2000 cayó injustamente en el ostracismo, vuelve. Y me encanta especialmente en cazadoras con borreguito dentro, en pantalones de pata algo ancha o en americanas. Si además eliges el color verde caqui, aún mucho mejor.
- La boina. La típica de paño con rabito. La que te compras en París cada vez que vas de turismo, en modo souvenir. Pues esa, otra vez está de vuelta (si es que alguna vez decidió irse).
- El denim. O tela vaquera de toda la vida. Lo que pasa es que este invierno está en modo más pesadito aún. Hazte con un mono (aunque ya te lo avisé el invierno pasado), con un abrigo, con un vestido… incluso conjunta camisa vaquera + pantalón vaquero. Mezcla tonos de denim… Es un amigo además, muy agradecido con el calzado rojo que está tan presente este invierno. Y con las americanas de estilo masculino y en cuadros, me chifla aún más.
- Los lunares. Sí, se quedan. En blusas, en jerseys de punto, en vestidos… en todo. Alegra un look de oficina con una blusa de lunares, combina un vestido de corte túnica con deportivas, ponte una falda de lunares con una perfecto de piel… juega con ellos para que no se te vea demasiado Joan Collins en el papel de Alexis en Dinastía.
- Los pendientes XXL. Del verano también se quedan. Grandes, largos, exagerados. De flecos, de pompones, de figuras (mis preferidos). No tienen por qué ser pesados, pero sí algo exagerados. Ideales para alegrar una camisa blanca + pitillo + mocasines + trench fluido.
- El terciopelo. En una americana o en un traje coordinado tipo sastre. Tanto en azul noche, como caqui o en burdeos, será un acierto estupendo. Te lo pondrás más de lo que piensas, ya que funciona igualmente bien con mocasines como con tacones o deportivas.
- Las flores. Sobre todo en zapatos y bolsos. Un capricho muy de temporada, porque te cansará más. Pero date el gusto si te va lo estampado. También las verás en vestidos, pero me encanta la idea de los zapatos estampados.
Y el 7+1 es para los flecos. Si este invierno tienes algún evento, atrévete con un vestido cuajado de flecos. Las plumas continúan estando ahí, pero personalmente me parecen más apetecibles los flecos. Frente a las plumas, estilizan más y dan un movimiento muy especial a la silueta. Las plumas son más caprichosas, más voluminosas y especialmente favorecedoras en chicas muy delgaditas.
No se te ocurra: cuidadín con la pana porque es un tejido con volumen y tiende a aumentar kilos y anchos. Así que si la cadera es tu talón de Aquiles, no la elijas en pantalones.
Ojito con la boina que se ve cada cosa emparentada con Marianico el Corto que da algo de susto. Practica delante del espejo y respeta su manual de uso: no te la cales hasta las orejas, que cubra media frente, que deje salir pelo por debajo y por los laterales, que quede ligeramente abullonada en la cabeza… que te favorezca, en definitiva.
Pendientes XXL y cuello corto. Porque te lo van a acortar más. Elígelos grandes pero no que cuelguen mucho, para que te favorezcan más. Y si tienes el cuello muy largo, para no parecer una jirafa, búscalos grandes pero de corte más redondeado.
Lo encontrarás en: la americana de terciopelo es de Massimo Dutti. Los pendientes, de Uterqüe.