Ya estamos de vuelta. Regresamos a los buenos hábitos, después de la vida salvaje que nos da el verano y que tan bien sienta. Y empezamos poniendo un poco de orden mental para saber qué compras serán las que nos arreglarán un armario eficiente para la próxima temporada de otoño-invierno. Porque ya sabéis que soy partidaria de armarios bien pensados, de armarios que se combinan a la perfección y que se adaptan a cualquier situación. Hoy empezamos con las prendas de abrigo que tienes que tener este otoño-invierno 2017-2018. Que tienes que comprar o que simplemente tienes que rescatar de otras temporadas:
- Una cazadora de piel negra estilo perfecto. A estas alturas de la película tienes que tenerla ya. Pero si no es el caso, no esperes más. Es un básico perfecto para entretiempos fresquitos y para cuando el frío aprieta un poco más, pues le pones un chaleco de pelo encima. Un incombustible que además encuentras en todo tipo de tiendas.
- Un trench, y preferiblemente, finito. ¿Recuerdas el que te recomendé en verano? pues puedes seguir usándolo. En algodón, en seda, en tejido de gabardina… ideal para esta transición de verano al otoño. Con vestidos largos es ideal, con una simple camiseta con mensaje y pitillos vaqueros…
- Una americana oversize o un abrigo estilo masculino. Si tu silueta lo permite, atrévete con los cuadros. El rollo príncipe de Gales tiene un punto genial con camisa blanca y boyfriend jeans + botines con el tobillo al aire.
- Un abrigo marinero rollo lobo de mar o de corte militar. Y no se van. Ahí siguen desde hace años. Con una boina o una gorra de aire marinero este año tiene un puntazo. Combínalo con un bolso estilo tote, grandote (este año se llevan los bolsazos), mocasines, camiseta marinera… un clásico que siempre resulta. O jersey de cuello vuelto mostaza y botas de caña muy muy alta.
- Un plumífero bien gordito. Este año es el de los plumíferos sin duda. Y eso nos pone muy felices. Dejaremos de pasar frío porque te lo podrás llevar hasta de marcha. Búscalo ancho, un pelín oversize y atrévete con colores como el rojo, el mostaza, el azul tinta o un tono metalizado.
5+1: no es un sexto porque no vale para todo el mundo (por gustos o por perfil). Pero si es el caso, hazte con un chaquetón de pelito (sintético pero aparente) y preferible si te atreves con algún color tipo el rosa empolvado, por ejemplo.
Si eres una fiel seguidora de este cortijo no te pillará nada nuevo. Son básicos de fondo de armario, de los que pueden venir con más o menos fuerza según la temporada pero con tanto estilo que resultan siempre un imprescindible.
No se te ocurra: el plastiquete. NO. Ya sabéis que si no hace falta hipotecar las retinas y los premolares, que simplemente hay que tener sentido común y buscar algo que dé el pego.
Si eres de perfil ancho, evita los cuadros. Apuesta mejor por los colores sólidos, pero no renuncies al rojo o al mostaza. No tienes por qué ir siempre de negro.
Si tienes más cadera que hombros, di no a los abrigos masculinos de largo a la rodilla. Mejor bajo la cadera. Porque de la otra forma te harán un bloque raro y desproporcionado que resaltará aún más la cadera.
El plumífero se lleva flofflof. Así que para que no parezca que has salido con el nórdico de casa, a toda prisa; elígelo con un largo máximo a la cadera.
Lo encontrarás: el abrigo eséste y el plumífero, éste. Ambos de Zara.