Por fin los cajones de las medias nos sonríen cada mañana. Ellos, que llevan tantos meses desatendidos, se vuelven a sentir los protagonistas de la casa. Además de las medias tupidas, las medias de rejilla están de vuelta. @aidaricomon me preguntaba por un manual de uso de este tipo de medias que pueden redondear un look o directamente cargárselo. Porque más allá de la tendencia hay un poquito de sentido común que es necesario respetar.
Las medias de rejilla son aptas para todas, independientemente de la edad y de la estatura y peso. Es más una cuestión de cómo combinarlas adecuadamente para no meter la pata. Veamos:
- Lo primero, el ancho del agujerito. Yo recomiendo siempre las que tienen el agujerito pequeñito. Me parecen bastante más elegantes que cualquier otra opción. Además de que son las que más favorecen y estilizan la pierna.
- Son adecuadas para cualquier situación y prenda, pero evítalas con minifaldas, minishorts y similares. Mucho mejor con vestidos a la rodilla o de largo midi.
- Las versiones en calcetín son ideales para cuando hay que llevar calcetines pero no nos apetecen los típicos tupidos. Aquí te puedes permitir las de rejilla grande, pequeña, con algún adorno tipo lacito detrás… Con un mocasín, bailarinas, zapato masculino, deportivas… quedan muy bien.
- Si te gustan los pantalones rotos pero te mueres de frío por los agujeros del pantalón, ponte unas medias de rejilla debajo.
- Con un simple vestido negro y botín, le dan un punto al conjunto. Mucho mejor si las combinas con prendas básicas, sin demasiados estampados ni texturas.
No se te ocurra: meter una media de color debajo de la de rejilla. En general, meter ninguna media debajo de la de rejilla. O las llevas o no las llevas. Pero ya si eso, pero no. NO.
Las de agujero enorme. Es lo menos fino que te puedes echar encima. Evítalas si lo quieres ir disfrazada por la calle o si tu estética no es la burlesque o pin-up.
Con botas. Ni por la rodilla ni por encima de la rodilla. La delgada línea que separa lo elegante de lo chabacano es eso, muy delgada.
Con miniprendas tipo minifaldas. Si eres jovenzuela veinteañera te puedes permitir casi todo. Pero pasando los 30, no. Siempre la versión elegante por encima de la locuela.
Combinando con texturas. Las medias ya tienen demasiado poder por sí mismas. Así que no la combines con lentejuelas, encajes, flecos (muy París años 20… demasiado carnaval), plumas, jacquard, plumeti, flores… va de retro.
Lo encontrarás en: las de la izquierda son de Asos. Las de la derecha, de Calzedonia.