Como si hablásemos de un tratado en latín, hoy, pocas horas antes de cerrar mi temporada de feria 2009 (esta noche me despediré del Real hasta la que viene. El cuerpo humano tiene un límite) recojo un meme apasionante que me pasa Maca desde su laboratorio. Un poco de cultura no viene mal entre tanta fiesta.
El asunto va de libros: de los que nos gustan, los que odiamos, los que repetimos, los que recomendamos… De gustos tan personales y por tanto, tan dispares. Soy una apasionada lectora capaz de engullir cualquier cosa que cae en mis manos. Lo leo, siempre hasta el final, y después lo juzgo. He aquí los míos:
Un libro que nunca terminaré: ninguno. Siempre termino todo aquéllo que empiezo a leer. Aunque me cueste, siempre lo termino.
Un libro que tengo pendiente por terminar: “La hermenéutica del sujeto” de Foucault. Denso, muy denso. Para leer con los sentidos absolutamente despiertos. Pero a la vez maravilloso. Poco a poco lo leo, lo mastico lentamente. Así que lo terminaré, pero no todavía.
Un libro que me decepcionó: “La casa de los espíritus” de Isabel Allende. No está mal, pero me dolía tanta evidente inspiración en el realismo mágico de García Márquez y sus “Cien años de soledad”. También me decepcionó “Rayuela” de Cortázar. Lo cogí con mucho ahínco pero me pareció demasiado oscuro.
Un “best seller” que no tengo el más mínimo interés de leer: “El señor de las moscas” o “Gomorra” de Roberto Saviano. El primero, porque aunque mis diversos gustos literarios hace que caiga ante toda la narrativa que ven mis ojos; el estilo de novela épica, medieval o como se llame no me atrae en absoluto. El segundo, porque aunque lo está leyendo mi chatín y me lo cuenta (y le apasiona) a mí las historias de mafia y violencia me dan algo de repelús. Es que luego tengo pesadillas y todo.
Un libro que me gustaría volver a leer: “1984” de Orwell y “La montaña mágica” de Thomas Mann, que leí con 15 años y me gustaría recordar.
Un libro que me emocionó: “Cien años de soledad”, “Ana Karenina” de Leon Tolstoi, “La elegancia del erizo” de Muriel Barbery (en la que además hablan tanto de Ana Karenina), “Al sur de la frontera, al oeste del sur” de Haruki Murakami, “El principito” de Saint-Exupery, “La familia de Pascual Duarte” de Cela… tantos, tantos…
Un libro pendiente que seguro que leeré algún día: “Ulises” de Joyce. Me muero de ganas de leerlo, y sé que lo haré no muy tarde.
Un libro que me gusta leer siempre: Uno es “Charlie y la fábrica de chocolate” de Roald Dahl, que me apasiona. Otro es “Cien años de soledad” de Gabriel García Márquez (en realidad, cualquiera de los de este genio los leería una y otra vez).
Un libro que me gustaría que me regalaran: cualquiera que haya convencido y emocionado a quien me lo regale. Es como leer entonces con una parte de su alma.
Un libro que recomendaría: difícil… depende mucho de a quien. Si es alguien con un sentido del humor especial, “El pelo de Van’t Hoff” de Unai Elorriaga. Si es alguien muy reflexivo, “Verónica decide morir” de Paulo Coelho. Para lectores en general (incluso poco aficionados a la lectura), “El perfume” de Patrick Süskind.
Un libro que me sorprendió: “Beatriz y los cuerpos celestes” de Lucía Etxebarría. No esperaba que me gustase tanto.
Después de este rollo enorme y largo y denso modelo novela; sólo me queda pasarlo. Lo dejo para tres lectoras apasionadas:
Maba
Elle
Sandra
Volveré con ganas la semana que viene. Mientras, seguid tan guapas.
Fe de erratas: cierto, metedura de pata. Esto de escribir cosas serias en Feria pasa factura… Gracias a las que os habéis dado cuenta. No hablaba de “El señor de las moscas” (que por otro lado, leeré porque es muy interesante y que de medieval no tiene nada), sino de “El señor de los anillos”.