Hay tantos tipos de bodas como gustos personales. Así que puede darse el caso de que te inviten a una boda que se celebre en el campo, o en un sitio con césped. Y podrás ir tan mona como te apetezca, eso sí, teniendo en cuenta pequeñas peculiaridades del medio. Valgan como ejemplo ilustrativo estos 3 looks de invitada de boda campestre.

• Con alpargatas. El protocolo de ir de largo se desdibuja un poco más, por lo que puedes optar por un vestido largo (1) incluso si la boda es de día. Para desinformalizarlo un poco, elige unas alpargatas bonitas y especiales (2) que además te van a permitir moverte por el campo cómodamente. Y para el bolso, un sobre de rafia (3) en la línea de complementos naturales que hemos elegido.
• Con tacón cuadrado. Los zapatos de tacón cuadrado (5) no se hunden en el césped y te permiten ir elevada en las alturas sin regar el suelo de agujeritos. Combínalos a contraste con uno de los estampados de la temporada que encajan muy bien en el entorno: un vestido en cuadros vichy (4). Y si la boda es de día, una llamativa y bonita pamela natural(6).
• De plano. No es necesario ni ir de vestido, ni de tacón. Puedes decantarte por un conjunto de pantalón tobillero (7), mules planos (8) y unsencillo bolso en madera (9).

No se te ocurra: llevar tacones finos a no ser que te apetezca quedarte plantada allí en medio toda boda. Tampoco me vale el invento de los tacones. Esa gomita que se pone en el tacón para no hundirse. Con la cantidad de opciones que hay en zapatos, ¿de verdad tienes que elegir los que son incómodos en el césped?

Pedrería variada y formato alfombra roja. Mejor estampados, tejidos naturales, cortes románticos… pero no es el lugar idóneo para lucir todas tus lentejuelas y brillos del hogar.

Largo de día en este caso, vale. Pero siempre con un rollo romántico. No de pasarela. Olvídate de ir de invitada de Gala del MET.

Alpargatas vale, pero no cualquier par. Monas, bonitas, cuidadas, especiales. Es tu zapato de invitada de boda. No estás en un festival ni vas a revolver a un mercadillo.

Prendas que arrastren por el suelo. Ni vestidos muy largos, ni pantalones muy largos. Porque el campo es campo. Y no queremos llevárnoslo a casa de recuerdo.

Lo encontrarás en: en cada punto, su link.