12 looks para ir a trabajar en verano

Verano no combina con trabajo. Pero somos proletarias de la vida y no nos queda otra (a la gran mayoría) que tener que trabajar. Algunas de uniforme, otras pueden vestirse como quieran, pero las hay que trabajan en una oficina o en un entorno que exige un pelín de formalidad. Y surgen las dudas veraniegas del descoque, de los pies… así que hay que exprimir un poco más el cerebro. Todo es posible, estilarias amigas. Así que por petición de @carlorente, @cristinatenenbaum y @sisietabcn, un post con 12 looks para ir a trabajar en verano.

  1. Los vestidos camiseros o tipo trench. Esos que tienen botones delanteros, de largo a la rodilla. Mantienen cierto punto de sobriedad pero nos permiten ir algo más fresquitas. Con un poquito de manga o sisa (incluso en sitios más frescos, con una sencilla chaqueta de punto) y con unos zapatos destalonados con o sin tacón. Aquí.
  2. Los pantalones tipo baggy o similares. Que podemos combinar con un top, una blusa o una camiseta algo más arregladita. Puedes llevarlos con bailarinas, con mules planos, mocasines, destalonados de tacón, sandalias de tacón cuadrado de altura media, etc. Aquí.
  3. Las bailarinas en punta. Son una buena alternativa para ir cómoda si no queremos enseñar los pies. Con una falda midi, un sencillo pantalón tobillero o un vestido camisero. Aquí.
  4. Una falda con lazada a un lado. O con fruncido delantero. O un poco asimétrica. De largo a la rodilla podemos encajar cualquier falda que nos guste. Y arriba: una blusa, un top, una camiseta sencilla y bonita… con o sin mangas. Incluso en tirantes si el calor aprieta. Aquí.
  5. Una falda midi plisada. Los largos midis son el equilibrio perfecto para cuando nos apetece enseñar más escote o pie y no queremos pasarnos. Ese largo a media pierna contrarresta escotes o sandalias completamente descubiertas. Tanto en faldas como en vestidos. Aquí.
  6. Las sandalias de tacón. Si hace calor es perfectamente aceptable ir a trabajar de sandalias. Exige unos pies perfectos, pero por lo demás, adelante. Mucho mejor si las ponemos con culottes o tobilleros, largos midi, pantalones anchos, faldas o vestidos a la rodilla… Aquí.
  7. Los vaqueros. Siempre hay algún día que se permite ir en vaquero. Y si prefieres no llevar los pitillo (que son ideales con unas sandalias, top y americana algo oversize), atrévete también con los de corte palazzo (si te favorecen), que están a medio camino entre lo serio y lo informal. Dales el punto laboral con una americana. Aquí.
  8. Un vestido de lino. El lino es también para trabajar. Es cómodo y es fresco. Con un vestido acompañado de un bonito cinturón y de unos mules a tono, es perfecto. Aquí.
  9. Unas babuchas planas. Una buena manera de ir cómoda a trabajar. Desde vestidos, faldas, pantalones tobilleros hasta pantalones anchos o faldas pantalón. Aquí.
  10. Una sandalias de empeine cerrado. Es como la versión discreta de la sandalia. Fantásticas con faldas y vestidos si te apetece llevar tacón y el largo de la prenda es un pelín más corto de lo habitual. Aquí. 
  11. Un pantalón ancho. Sea palazzo, sea culotte. Y arriba se adapta perfectamente a todo lo que pongas. Aquí.
  12. Unas sandalias cruzadas. Con las tiras anchas te dará menos apuro llevar el pie completamente al aire. Aquí.

No se te ocurra: de look minifaldero. No es cómodo estar todo el día sentada en una silla con un vestido o falda cortísima. O con un short. Mejor siempre el largo a la rodilla.

Tacones muy altos y prendas muy cortas. Un equilibrio demasiado informal. ¿Te gustaría que tu compañero estuviera en camiseta de tirantes, pantalón corto y chanclas? Si él respeta el dess code en verano (seguro que también tiene calor y ganas de despelotarse), tú también puedes.

Sandalias planas rollo playa. Puedes llevar perfectamente unas sandalias planas de pie completamente descubierto siempre y cuando sean de calle y tus pies estén inmaculados e impolutos. De nuevo imagina a tu compañero con esos pies de uñas tremendamente terribles y en chanclas.

Alpargatas, deportivas… si las normas son así, no es recomendable. Si tus compañeros van de traje y corbata (analizar hasta qué punto las empresas tengan que seguir con este código de vestimenta masculino es harina de otro costal que necesitaría también de su análisis… algo en lo que no estoy del todo de acuerdo), tú tienes más opciones para no tener que ir tan encorsetada sin tener que caer en las alpargatas, las sandalias muy playeras o las deportivas.

Renunciar a tu estilo. Está claro que si hay normas es recomendable respetarlas, pero intenta siempre hacerlo desde tu punto de vista, sin tener que renunciar a tu estilo. Si no te gustan los tacones, no te los pongas. Si no te ves de traje de chaqueta, no los lleves. Busca siempre la formalidad que te pidan pero desde tu manera de entender tu forma de vestirte: tu propio estilo.

Lo encontrarás en: en cada punto, su link.

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